Tras negarse en un primer momento a apoyar la iniciativa, el oficialismo acompañó finalmente el proyecto que había sido consensuado por la oposición.
Con 222 votos afirmativos, 1 abstención y ningún voto negativo la Cámara de Diputados dio media sanción este jueves a la Ley que declara la Emergencia Alimentaria en todo el territorio nacional.
La iniciativa, impulsada y consensuada entre los distintos bloques al calor del reclamo de los movimientos sociales, la CGT y la Iglesia fue finalmente acompañada por el oficialismo que en un primer momento había barajado la posibilidad de bloquear su aprobación. El alto costo político que ello hubiese implicado a menos de dos meses de las elecciones generales terminó pesando más finalmente.
El gobierno de Mauricio Macri se había negado inicialmente a declarar la Emergencia Alimentaria por decreto e intentó bloquearla cuanto pudo para evitar que fuese tratada en el Congreso.
La iniciativa que obtuvo media sanción este jueves crea el Programa de Alimentación y Nutrición Nacional y habilita al Ejecutivo a reasignar partidas para reforzar la asistencia del Estado en comedores comunitarios.
El inicio del debate estuvo signado por el cruce entre la oposición y el oficialismo sobre la responsabilidad del gobierno de Macri en el aumento de la pobreza. La mayoría de los diputados opositores cuestionaron duramente al diputado Héctor «Toty» Flores, quien en su discurso se refirió a la necesidad de “pensar cómo salir de la situación actual”, como si fuera ajeno a la alianza gobernante que propagó y luego minimizó la pobreza en el país.
“La salida es trabajar, trabajar y trabajar”, insistió el legislador oficialista como si se trata de una cuestión de falta de voluntad.
“Hubo un diputado que dijo que hay que comenzar a pensar en cómo solucionamos la pobreza y lo dice tras cuatro años de gobierno. Slogan es el hambre cero que prometió Macri, el responsable es Macri y sí, queremos paz, pero no la paz de los cementerios», advirtió la diputada Victoria Donda cuando tomó la palabra.
En ese mismo sentido se expresó Nicolás del Caño, pero advirtió que la ley en sí es “un paliativo (…) no resuelve los problemas estructurales» porque “desde las PASO, hace un mes, los especuladores fugaron 100 leyes de emergencia que deberían beneficiar a millones y millones”.